“A medida que envejezco, mientras todavía tengo tiempo, anhelo
conocer ahora, más que nunca, mi verdadero yo, esa cosa aleatoria e ilusoria,
decorada con la personalidad. Nosotros creemos ser este caleidoscopio de
pasiones y distracciones. Somos un momento brillante y desconocido, suspendido
entre la memoria y la anticipación, ansioso en nuestras incertidumbres, y
condenado a desaparecer con nuestra conciencia. ¿Cómo puede tal misterio ser
fotografiado? ¿Qué queda para nosotros, excepto el asombro?”
No hay comentarios:
Publicar un comentario